Es momento de ser más conscientes sobre qué tantos productos empaquetados consumimos y cuáles llevamos a nuestras despensas.
Es innegable que debido al ritmo de vida que llevamos los alimentos y bebidas empaquetados se han vuelto un básico de nuestra despensa, pero ¿qué tan buenos o malos son para nuestra salud? Si bien pueden llegar a perdurar por algunos meses, pues sus fechas de caducidad suelen ser extensas, muchas marcas se han valido de la tecnología para que su empaquetado sea funcional para la absorción de oxígeno y humedad, dándoles la característica principal de perdurar hasta un año en almacenamiento sin el uso de conservadores.
Esto los convierte en empaquetados inteligentes que ofrecen mejoras tanto para el consumidor como para el fabricante. Por un lado, el comprador consume mejores productos no dañinos para el cuerpo y los puede tener por mayor tiempo en su alacena, mientras que del lado empresarial, se genera un aumento de ganancias por la competitividad al vender bajo estas nuevas formas de producción.
Pese a que existen un montón de marcas y productos en el mercado, actualmente en México existen empresas innovadoras que aplican dichas tecnologías y que ofrecen productos 100% naturales, como PractiRico y su línea Guisos con cero etiquetados de la NOM-051 y libres de conservadores, dándole a los alimentos un toque fresco, natural y sobre todo casero con sabor a tinga de pollo, cerdo en adobo y bistec a la mexicana.