Quizá no lo conocías, pero estamos seguros que después de leer esta nota no solo quedarás sorprendido con los beneficios del pasto de trigo, sino que querrás incluirlo en tu dieta desde ya, así que sigue leyendo porque esto realmente te interesa.
Vamos paso por paso. Primero debes saber que el pasto de trigo es considerado un brote tierno que surge de la semilla del trigo, que se obtiene generalmente a los 8-12 días de ser sembrado. Una vez germinado, se coloca en un sustrato donde recibe los cuidados necesarios para su maduración total. Lo sorprendente es que pese a medir tan solo 12 centímetros, es una gran fuente de nutrientes de fácil absorción que ayuda a mantener el equilibrio del pH en el organismo, además de tener un efecto benéfico para el sistema inmunológico.
Mientras que al incluirlo en tu dieta diaria aportará muchos beneficios y propiedades al cuerpo, al contener una gran cantidad de minerales como calcio, magnesio, hierro, aminoácidos, vitaminas A, C, B, E y K, así como enzimas y hasta 75% de clorofila, la cual ayuda a aumentar la calidad y cantidad de glóbulos rojos.
Así mismo, posee un efecto antioxidante que evita la inflamación del organismo, mejora la digestión y el metabolismo, aumenta la resistencia física, beneficia la hidratación y elasticidad de la piel, entre muchos otros efectos positivos en la salud. La recomendación es consumir el pasto de trigo en ayunas, ya sea solo el extracto o añadiendolo a jugos o licuados, primero en pequeñas dosis de 10 a 15 ml al día durante dos semanas y después, aumentar gradualmente la dosis hasta llegar a consumir 30 ml al día.
Y si te estás preguntando dónde puedes conseguirlo, la respuesta es con Cultivos Naturales San Francisco, marca que ya tiene en el mercado una bolsa de 100 gramos con este alimento vivo para complementar tu nutrición.
